Lego (Rocky)

Lego (Rocky) aún no está apadrinado

A ti que has abandonado a tu perro en una fría jaula y en invierno, podríamos compararte con Judas, porque con muy poco dinero has intentado calmar tu conciencia. «Es que nadie lo quiere» fueron tus palabras al referirte a un ser vivo que ha compartido contigo, cuando estabas sólo, los mejores años de su vida. Pero ahora tu piso es demasiado pequeño, tú no tienes tiempo, nadie quiere quedarse con él…. y por eso, siempre es mejor abandonarlo en una perrera, ¿verdad?

Que Lego (su nuevo nombre) ni si quiera mirase para atrás cuando entraba en nuestro refugio y tú te quedabas cobardemente en la puerta, era claramente un signo de que le interesaba más lo que el mundo tenía que ofrecerle que lo que tú le habías estado dando todos estos años. No dudó en seguir a nuestra voluntaria dócilmente mientras lo conducía a un frío chenil. Tú no lo viste, pero él, cuando se dió cuenta de que iba a ser encerrado, lloró, mucho, pegaba su cuerpecito al de la voluntaria que intentaba calmarlo con lágrimas en los ojos y maldiciéndote.

Ojalá quien ahora dice que te quiere te trate igual a ti en el futuro. Porque la justicia debe existir.

Lego es dócil, confía en las personas, es suficientemente joven como para que le queden aún muchos años por delante para hacer feliz a quien si lo merezca. Al ser adulto tiene ya su tamaño definitivo y está sano. Poco a poco os podremos ir mostrando más fotitos suyas y contando más cositas de su carácter

23/11/2018:

Lego se está mostrando como un perro absolutamente equilibrado y sociable con sus congéneres. En estos vídeos veis cómo reacciona con sus compis de jaula, también machos, al ser presentados en el patio del refugio.

A pesar de que está aún un poco descolocado y necesitará unos días más para «acostumbrarse» a su abandono, Lego no tiene ni un mal gesto, ni con personas ni con otros perros.