Aunque cada vez hay más información y se oye hablar más de las denominadas «señales de calma», entendemos que es un tema tan importante para lograr una mejor y más respetuosa convivencia entre perros y humanos, que os dejamos hoy la traducción al castellano del artículo “Calming Signals – The Art of Survival” de Turid Rugaas, Educadora canina noruega, especialista en comportamiento canino y presidenta de la Asociación de Educadores Caninos de Europa (Pet Dog Trainers Europe) realizada por Nicolás Planterose, de Tartaruga Educació Canina.
Para las especies que viven en manada es importante ser capaces de comunicarse con los de su mismo tipo. Tanto sea para cooperar en la caza, traer la comida para sus cachorros, o quizás lo más significativo: para vivir en paz con los demás. Los conflictos son peligrosos, causan daños físicos y debilitan el grupo, algo a lo que ninguna manada se puede arriesgar, sin duda, una posible causa de extinción.
Los perros viven en un mundo de percepciones sensoriales, la gran mayoría visuales, olfativas y auditivas. Fácilmente perciben detalles minúsculos: una ínfima señal, cualquier pequeño cambio en nuestro comportamiento, la expresión en nuestros ojos… Los animales de manada son tan perceptivos a las señales que un caballo puede ser entrenado para responder a las contracciones en nuestras pupilas y un perro para atender a una voz susurrante. Realmente no hay necesidad de gritar los comandos (órdenes) ni poner un tono de voz grave y rígido. Es a lo que Karen Prior (bióloga especialista en comportamiento) llama: “matar moscas con una pala”. Los perros tienen cerca de 30 señales de calma, quizás incluso más. Algunas de estas señales son usadas por la mayoría de los perros, Y hay algunos que llegan a dominar un rico “vocabulario gestual”. Esto varía en cada perro.
El Problema. Los perros usan este sistema de comunicación también con los humanos. Lo hacen simplemente porque es su lenguaje y piensan que cualquiera lo puede entender. Fallando en la interpretación de las señales de calma con las que tu perro intenta comunicarse contigo, e incluso hasta castigándolo por usarlas, corres el riesgo de causarle serios daños a tu perro. Algunos pueden simplemente dejar de hacer señales, incluso hacia otros perros. Otros como resultado pueden desesperar y frustrarse al punto de ponerse muy nerviosos, agresivos o sobre-estresados. Los cachorros y perros jóvenes pueden directamente entrar en estado de shock.
Conocimiento básico. El padre de la familia llama a “Duck” y, como ha aprendido de su adiestrador, imposta su voz para que suene estricta y dominante para que Duck sepa quién es el que manda. Duck encuentra la voz de papá algo agresiva, e instantáneamente le da una señal de calma con el propósito de lograr que deje de mostrarse agresivo. Duck quizás se lamerá el hocico, bostezara, girara su cara, se pondrá a olisquear algo- lo que enfurecerá realmente a papá porque lo entenderá como que está siendo cabeza dura, desobediente y que lo está haciendo a propósito. Duck es castigado por usar sus señales de calma para calmar a papá. Este es un típico ejemplo de lo que ocurre cada día con muchos propietarios de perros. Necesitamos aprender a interpretar el lenguaje de los perros para poder entender lo que nos están diciendo. Ése es el secreto para tener una feliz convivencia juntos.
CÓMO USAN LOS PERROS LAS SEÑALES DE CALMA.
Bostezar. Un perro puede bostezar cuando alguien se inclina por sobre su cuerpo, cuando su dueño suena enfadado, cuando se producen gritos o hay conflictos en la familia, cuando acude al veterinario, cuando alguien mira o camina directamente hacia él, cuando se excitan demasiado por exceso de juego o porque van a salir de paseo, cuando le pides que haga algo y no se siente bien para hacerlo, cuando las sesiones de entrenamiento son muy largas y se encuentra fatigado, cuando dices por hacer algo que desapruebas, y en muchas más situaciones. Toda señal de intimidación como: caminar directo hacia él, posarle una mano encima, inclinarse sobre él, mirarlo fijamente, realizar movimientos rápidos e impredecibles, etc. Causarán siempre que el perro realice una señal de calma. Como decíamos hay cerca de 30 señales, entonces en la situación que un perro bostece otro podría relamerse o usar cualquier otra. Todos los perros conocen todas las señales. Cuando un perro bosteza y gira su cabeza ante otro perro, el perro al que le está “hablando” probablemente se lamerá el hocico, se girará sobre su espalda y comenzará a hacer algo diferente. El primer perro quería calmar al segundo y lo ha conseguido. De esta forma los perros resuelven sus relaciones. Las señales son internacionales y universales. Un perro de Japón podría ser entendido por un Elkhound que vive en un desolado valle en Noruega. ¡No tendrían problemas de comunicación!
Lamerse el hocico (Licking).Lamerse es otra señal que usan frecuentemente. Especialmente por perros negros, perros con mucho pelo en la cara y otros cuyas expresiones faciales por alguna razón son más difíciles de apreciar (bulldogs) que los perros con colores claros, ojos visibles y largos hocicos. Pero cualquiera puede usar el Licking, y todos los perros lo entienden sin importar cuán rápido lo hagan. El rápido y pequeño lamido en el hocico es más fácil de apreciar si observas a tu perro de frente. Lo podrás ver mejor si encuentras un sitio en la casa donde te puedas sentar con calma y quieta/o a observar. Una vez que hayas aprendido a identificar el lamido podrás verlo incluso mientras caminan en el paseo. A veces no dura más que un brevísimo instante, en el que la punta de su lengua asoma por fuera de su boca. Pero todos los perros siempre lo ven, entienden y responden a ello. Toda señal es siempre respondida con otra señal.
Darse vuelta/ girar la cabeza. El perro puede girar su cabeza lentamente hacia un lado, girarla en dirección completamente opuesta, o girar su cuerpo de modo que quede de espaldas al receptor que quiere calmar. Esta es la señal que podrás ver más frecuentemente en perros. Cuando alguien se acerca de frente a tu perro, cuando parezcas furioso, agresivo o intimidante, cuando te inclines hacia él para regañarlo mostrará cualquiera de las variaciones de esta señal. Cuando el perro sea tomado por sorpresa rápidamente girará su cuerpo y dará la espalda. Cuando le intentes tomar una fotografía de su cara o actúes de cualquier forma de intimidación, él te ofrecerá esta señal. En muchos casos, ésta sola señal hará que el perro receptor se tranquilice. Es una herramienta fantástica para resolver conflictos y es usada frecuentemente por todos los perros, tanto adultos como cachorros, tengan el temperamento que tengan. ¡Deja que tu perro la use! Los perros son expertos en resolver y evitar conflictos. Observa y te enseñaran cómo lo hacen.
Posición de Juego. Agachar sólo la parte delantera con los codos apoyados en el suelo puede ser una invitación al juego si el perro da pequeños saltos o movimientos de patas de modo jocoso. Sólo algunas veces el perro puede mostrar esta misma posición como señal de calma. Este tipo de posiciones corporales frecuentemente tienen varios significados y pueden ser utilizadas en diferentes situaciones- de hecho la invitación al juego suele ser una señal de calma en sí, porque el perro transforma una situación potencialmente peligrosa (el encuentro con un perro en el paseo) mermando la tensión y divirtiéndose con una sesión de juego seguro. Hace un tiempo, en una clase de cachorros, uno de ellos tenía miedo de los demás al principio. Ellos respetaron su temor y lo dejaron solo, le dieron la oportunidad de observar desde fuera lo que acontecía. Al final de la clase, el cachorro se atrevió a acercarse al resto. Cuando lo hizo se inclinó hacia la posición de juego tan pronto los otros cachorros lo vieron. Fue una evidente combinación de temor por los cachorros y ganas de tomar parte de su juego. Cuando dos perros se acercan entre sí muy abruptamente, con frecuencia veras que muestran la señal de juego. Esta es una de las señales más fáciles de ver, especialmente porque suelen mantenerse en esta posición algunos segundos, lo cual nos deja tiempo suficiente para observar esta maravillosa señal.
Olisquear el suelo. Olisquear el suelo es una señal usada periódicamente. En grupos de cachorros se pueden ver muchas veces. También cuando sales con tu perro de paseo y alguien viene a saludarte directo a ti, en sitios donde muchas cosas están pasando (tráfico, mucha gente, muchos ruidos), sitios con muchos olores o cuando ven objetos que no están seguros de qué son y los encuentran intimidantes. La señal de olisquear el suelo (o paredes, papeleras, árboles, en definitiva el entorno) abarca un rango amplio, desde mover la nariz suavemente hacia abajo y volverla nuevamente, hasta pegar la nariz al suelo y olfatear persistentemente durante unos minutos. ¿Alguien se acerca a ti por la calle? Observa a tu perro. ¿Dirige la nariz hacia el suelo aunque sea mínimamente? ¿Gira su cuerpo dando un lado a quien se aproxima y olisquea ese trozo de acera? Por supuesto que los perros olisquean y olfatean mucho, también con el propósito de “leer el periódico” y como disfrute propio. Los perros están pre-programados para usar su olfato y, de hecho, es su actividad favorita. Sin embargo, en ocasiones lo hacen a modo de señal de calma, dependerá de la situación. Entonces ¡presta atención a cuándo y en qué situaciones ocurre el olisqueo!