Muchas son las voces que últimamente se posicionan drásticamente en contra de «humanizar» a los perros. Aquí te contamos nuestra visión al respecto y te avisamos que no es oro todo lo que reluce.
Si entendemos el término «humanizar» por conferir características y necesidades exclusivamente propias de humanos a seres vivos que no lo son, podríamos decir que estamos completamente de acuerdo con quienes defienden que no es bueno humanizar a los perros. Así, no es bueno hacerles comer con cubiertos, obligalos a caminar a dos patas o someterlos a mutilaciones estéticas según las modas.
Pero lo que muchas personas olvidan es que hay necesidades muy evidentes que ambas especies compartimos. Sin ir más lejos, la necesidad de contacto social, por ejemplo, es algo que tanto personas como perros necesitamos para desarrollarnos de manera equilibrada. Mantener a un perro aislado, sin un contacto diario y de calidad, con otros perros, con personas, … es una forma bastante frecuente de maltrato. ¿Dejarías a un niño o a una niña viviendo solo en el campito al que vas los fines de semana? Pues a un perro tampoco. Así de claro y así de contundente. Por eso, desde «Siempre Contigo», no damos perros en adopción como guardas de fincas, naves, ganado… Todos los perros se merecen ser tratados como uno más de la familia, todos y cada uno de ellos se merecen que conozcamos, respetemos y procuremos dar respuesta a sus necesidades como ser vivo.
Compartimos el mensaje de nuestra amiga y colaboradora Mary Sánchez Tey, educadora de Pasion4dogs Educación Respetuosa y os animamos a que os informéis sobre las necesidades de cada animal antes de incorporarlos como miembros de pleno derecho a vuestra familia.